Después de perderse el partido contra el Barcelona tras un nuevo positivo en las pruebas PCR, Cristiano Ronaldo ha decidido cambiar su apodo por el de PCR7. De todos es sabido el afán competitivo de Cristiano, y su ansia por acumular siempre más records que cualquier otro: Él tiene que marcar más goles, chutar más penaltis, tener más deportivos… Y por eso a la hora de hacerse las pruebas pcr también tiene que ser el que más se haga.

«Soy el mejor del mundo. Y por eso, a la hora de hacerme PCR también quiero ser el mejor del mundo. Si me tengo que meter 30 palillos por la nariz, me los meteré tan hasta el fondo, que me los podrán sacar por el culo». De momento, Cris se perdió el partido que su equipo perdió contra el Barça, y a este ritmo, es probable que también se pierda la vuelta.