La lesión de Coutinho ha sido una bendición para las arcas azulgranas. Como el jugador no llegará a 100 partidos (se queda en 90) el Barcelona no tendrá que pagar un bonus de 20 millones de Euros al Liverpool. Es triste que tu propio equipo se alegre de tu lesión, pero más triste es haber costado el dineral que costó el brasileño y ofrecer un rendimiento tan bajo.
Las malas lenguas incluso sospechan que el médico que certificó la lesión de Coutinho podría tener relación con la directiva azulgrana, ya que en lugar de bata blanca, vestía la camiseta del club, y lo único que hizo fue decir todo el rato: «Esto está mal… Lesionado, lesionado seguro»